Con un cuerpo espectacular y la candidez que la caractiza encanto al lente de Bellapod. Aunque transcurrieron horas de arduo trabajo, siempre mostró una dulce sonrisa y nos deleitó tanto con su belleza externa como interna.
Dayana encuentra en el mar y la playa, momentos de paz y tranquilidad, lo cual expresa en su carácter tan delicado y sereno. Se declara adoradora de los mariscos, especialmente es una "cevichera" empedernida.